martes, 3 de mayo de 2011

Día internacional de la libertad de prensa

La celebración del día internacional de la libertad de prensa se celebra hoy 3 de mayo. Libertad muy cuestionada por varios flancos. Queremos hacer llegar 2 comunicados relativos al evento. Uno de la Asociación de la Prensa de Málaga respecto a la precariedad laboral instalada en el gremio que se ve agudizada estos días con despidos; y otro de la Federación de Andaluza de Asociaciones de la Prensa relativo a los problemas generales a los que se enfrentan los profesionales y la prensa misma con la esperanza de que sirvan para obtener las mejoras necesarias para su funcionamiento adecuado a la responsabilidad que la sociedad ha depositado sobre ella.


ASOCIACIÓN DE LA PRENSA DE MÁLAGA

PRONUNCIAMIENTO ANTE LA PRECARIEDAD LABORAL Y LA DESTRUCCIÓN DE EMPLEO

Conmemoramos el Día Internacional de la Libertad de Prensa. Debería ser una jornada para festejar lo que significa esta fecha, deberíamos recordar todos los periodistas los logros conseguidos, rememorar el largo camino andado para conseguir tanto la ansiada libertad de expresión que conlleva la de prensa. Un día en el que deberíamos poder alzar la voz sin titubeos para expresar que ejercemos nuestra profesión con DIGNIDAD, INDEPENDENCIA y LIBERTAD.

Pero nada más lejos de la realidad. El 3 de mayo sólo nos sirve a los periodistas para recordar la vergüenza propia y ajena que sentimos al ver la situación actual que atraviesa nuestra profesión. Vergüenza por no tener capacidad de crítica, por no poder ejercer con dignidad nuestra profesión, por no poder cumplir con la esencia de nuestra labor periodística porque la independencia y la libertad, premisas que la han de sustentar, han sido sustituidas por criterios económicos y políticos, razones tan inconfesables como injustas en tantas y tan diversas ocasiones; vergüenza por los sueldos que recibimos y por los que no recibimos y, sobre todo, porque actualmente la PRECARIEDAD LABORAL y la DESTRUCCIÓN DEL EMPLEO azota más que nunca a nuestro sector, ahí tenemos, todos los casos que se vienen dando en cualquier parte, esta misma semana en El correo de Andalucía, hace unas pocas, en medios de la misma Málaga, capital y provincia.

Para informar, los periodistas tenemos que informarnos adecuadamente, investigar, superar diversidad de obstáculos, acertar en las fuentes y, muy especialmente, contrastar lo que conseguimos para después poder plasmar una información para el ciudadano que se ajuste a la realidad, siendo transparentes, independientes y veraces. Pues bien, nuestra realidad es que actualmente se han cuantificado, a nivel nacional, la destrucción de 3.854 puestos de trabajo desde finales de 2008, los últimos, 7 concretamente, en El Correo de Andalucía de la capital hispalense. En Málaga se han cerrado varios medios locales y reducido hasta lo imposible y abusivo las redacciones de prensa, radio, televisión y agencias. Se han recortado sueldos e incluso horas de cotización salarial, pero lo que no se ha reducido en ningún momento, ni en Málaga, ni en Andalucía, ni en España, son las horas reales y efectivas de la jornada laboral, incluyendo los festivos y días que corresponden de descanso.

Con este breve análisis de nuestra situación, los periodistas no sólo queremos una vez más –también lo hicimos claramente en el reciente Congreso de Jerez de los Periodistas Andaluces, de todos los periodistas de esta comunidad autónoma, unos cuatro mil- levantar la voz para que se conozca el verdadero drama que se vive en nuestra profesión, si no también alertar de las consecuencias que ello conlleva para la sociedad en general, para toda la sociedad y para la misma realidad de nuestra democracia. Los brutales recortes de plantilla que se están produciendo de forma indiscriminada en las redacciones, así como los abusos y precariedad que denunciamos, merman la calidad de la información. Y cada vez que un medio de comunicación echa el cierre deja huérfana de pluralidad y autocrítica a la sociedad.

Sin embargo, el Día Internacional de la Libertad de Prensa también es un día para la reflexión interna. No caer en la autocensura por miedo a perder el puesto de trabajo, ni acomodarnos al poder sea económico o político, o a líneas editoriales vacías de ambición periodística pero llenas de argumentos extraños al verdadero periodismo, es un ejercicio que debemos realizar cada día para no perder nuestra función social como transmisores de información.

Pese a todo, los periodistas también queremos dejar claro que tenemos un compromiso firme con la sociedad y que seguiremos trabajando y luchando por mantener y conseguir una libertad de expresión real y una libertad de prensa efectiva.

Por todo ello, desde la Asociación de la Prensa de Málaga rechazamos rotundamente y exigimos que se erradique:

-La precariedad laboral actual en los medios de comunicación.

-Las presiones y censuras impuestas a los periodistas en muchos medios de comunicación.

-La destrucción de empleo que muchas ocasiones no están justificadas.

-Las amenazas que muchos compañeros reciben sólo por el hecho de ejercer su profesión.

-Las muertes que en tantos países se producen por el ejercicio del periodismo con entrega y rigor.



FEDERACIÓN ANDALUZA DE ASOCIACIONES DE LA PRENSA 

ANTE EL DÍA MUNDIAL DE LA LIBERTAD DE PRENSA

El Consejo Directivo de la Federación Andaluza de Asociaciones de la Prensa, desea manifestar públicamente su preocupación por el grave retroceso que en la práctica está sufriendo la información libre y plural en el ámbito de la comunicación pública. La precariedad en el empleo de los que tienen que ejercer y garantizar ese derecho, la intromisión de los poderes políticos en el mundo del periodismo, la concentración editorial a través de grandes fusiones empresariales, el empeoramiento de las condiciones laborales de los periodistas, la confusión social generada en torno a lo que es periodismo y lo que no lo es, está provocando una permanente disminución del derecho que tienen los ciudadanos a recibir una información veraz, plural y libre y provocando, injustamente, un descrédito de los profesionales del periodismo.

La opinión pública es el motor de la acción social y la acción política. Pero la opinión pública en una sociedad de masas sólo se forma a través de la información que detentan los medios de comunicación social y si sus protagonistas principales, es decir, los periodistas, no pueden ejercer con garantías el pluralismo informativo por las presiones de su entorno, esa opinión pública nunca podrá configurarse conforme a la verdad de los hechos y por tanto su manifestación estará viciada.

Nos preocupa igualmente el nivel de crispación, ajeno a los profesionales, generado por la toma de posición partidista de algunos medios de comunicación cuya ubicación en el entorno de partidos políticos concretos, hurtan a los ciudadanos el conocimiento imparcial y objetivo de los hechos que siempre son sagrados, aunque la opinión, por supuesto, siempre sea libre. Pero la intencionalidad política de las noticias periodísticas en el ámbito de la información (no en el de la opinión) es un lastre peligroso para la independencia de los profesionales y la pluralidad de los contenidos. Si se hace un periodismo de partidos será todo lo que quiera ser menos periodismo y además desorienta y crispa a una sociedad mal informada que, de esa forma, no tiene acceso a la verdad de los hechos sino a su manipulación. Es la UNESCO la que ha dicho: “ Una prensa libre, pluralista e independiente es un componente esencial de toda sociedad democrática”.

El predominio de medios de comunicación como anexos de partidos políticos está contribuyendo a tamizar la veracidad de la información que reciben los ciudadanos sorprendidos en su buena fe, salvo aquellos que se alinean claramente en un posición política y seleccionan previamente los medios en función de esa posición. La manipulación de las noticias y la selección de los contenidos para beneficiar posturas políticas concretas no deja de ser una perversión de la comunicación pública veraz y plural y está desacreditando gravemente la información que facilitan muchos medios.

La libertad de prensa está amenazada desde muchos frentes. Algunas de estas amenazas son de una evidencia meridiana y de fácil identificación pero otras, quizá las más peligrosas, proceden de una manipulación sutil que pretende presentar los hechos con distorsión de la verdad y al servicio de intereses que, pudiendo ser legítimos no legitiman la información periodística que debe buscar siempre esa verdad.

Abogamos en este Día Mundial de la Libertad de Prensa por un periodismo más libre de injerencias externas y especialmente en estos momentos de crisis y crispación social y política.




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